martes, 24 de septiembre de 2013

Una membrana idiopática

Cuando ya parecía que todo se normalizaba y había recuperado hasta casi un 80 % de la visión que tenía antes, ¡un nuevo sobresalto! Un día comencé a ver todas las líneas rectas distorsionadas. Era como tener una enorme gota de agua delante del ojo, que deformaba los rostros, las formas, las imágenes… Me asusté. Ver así genera una enorme angustia e inseguridad. Y, de nuevo, una tarde de fin de semana, tuve que correr a urgencias a la clínica Barraquer. Fue en noviembre de 2008.

¿Qué ocurría? El diagnóstico reveló que se me había formado una membrana idiopática en la retina. Que esta membrana, formada por diminutos capilares sanguíneos, había sufrido la rotura de algunos de estos vasos. La sangre y el líquido habían invadido la retina y esto es lo que provocaba la visión distorsionada.

Una membrana “idiopática”, dice el informe. ¿Qué es esto?, pregunté. La doctora de urgencias que me atendió dijo que idiopático significa que no se conoce el origen o la causa. Me quedé todavía más desconcertado. También me dijo que esto solía ocurrir cuando había habido accidentes vasculares como el mío, una zona isquémica y una zona edematosa en la retina. Las membranas retinianas son frecuentes en pacientes con degeneración macular asociada a la edad, que no es mi caso.

Al día siguiente me visitó una especialista en fondo de ojo, la doctora Viver. Me hizo pasar por varias pruebas para ver exactamente cómo lo tenía. Entre ellas una tomografía de coherencia óptica, una OCT, la primera de muchas (en la foto podéis ver una OCT de un fondo de ojo con gotas de líquido, similar a la mía en aquel momento). La doctora fue muy amable y me explicó muy bien cómo son y se forman estas membranas neovasculares en la retina. Se pueden producir por causas diversas, una podría ser la falta de oxígeno: tras una trombosis, el tejido ocular se rehace, generando un cúmulo de vasos sanguíneos nuevos para irrigar la zona dañada. Pero este tejido es frágil y los capilares se rompen con facilidad o exudan líquido. ¿Tratamiento? Hasta hace unos años no lo había, y la persona tenía que resignarse a ir perdiendo visión sin remedio. Afortunadamente, me dijo la doctora, desde el año 1996 existe una terapia bastante eficaz: las inyecciones intraoculares con un medicamento que inactiva la membrana, sellando los vasos que supuran. Este tratamiento resuelve parcialmente el problema, al menos durante un tiempo, e impide la pérdida de visión. En algunos casos, se puede recuperar la visión perdida e incluso detener el problema.

La verdad es que al oír la noticia sentí a la vez alivio, porque había un remedio, pero por otro lado la idea de recibir una inyección directa al globo ocular no me hacía ninguna gracia. Hoy, es la única solución reconocida por la oftalmología oficial. Aunque se está investigando para buscar medicamentos más eficaces y de efectos más duraderos. Pero todo está en fase experimental y los nuevos tratamientos tardarán unos años en salir.


La prescripción de la Dra. Viver fue una inyección de Lucentis. Y en la próxima entrada explicaré mi experiencia, el inicio de un largo calvario… porque no fue la única vez, ni mucho menos.

3 comentarios:

  1. Hola! mi nombre es Helena y soy de Perú. Encontré muy interesante tu publicación ya que actualmente me encuentro pasando por un caso muy similar al tuyo y me gustaría saber si hubo resultados positivos en el tratamiento que indicaste. Saludos cordiales.

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  2. Hola, Helena. El tratamiento con Lucentis o Avastin, ahora mismo, es el único que se ofrece para este tipo de problemas. Cuando hay derrame de sangre o líquidos la inyección lo detiene y sí, en mi caso he recuperado visión y he resuelto temporalmente el problema. Pero no es una solución definitiva... siempre llega un momento en que tienes que volver a pincharte. Ahora se están probando nuevos productos y otras terapias que sean más eficaces y menos agresivas. Si lees en otras entradas de mi blog, y en la entrevista al Dr. Monés, verás más sobre este tema. ¡Todo está en fase experimental! Pero hay esperanza. Mucho ánimo.

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  3. Hola soy Julia de Chile, necesito mas información respecto al tema estoy en la misma circunstancia tuya pero sin haber tenido nada que lo provoque. El miedo es grande. Me puedes indicar donde más buscar información por favor gracias

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